Todo lo que necesitas saber sobre Web Design
Es posible que necesites un
nuevo diseño web en Valencia si tu página tiene más de cuatro años. Y es que el entorno digital es uno de los ámbitos que cambia más rápidamente. Sin duda, mucho más que nuestro entorno físico. ¿Cada cuánto pintarías tu negocio?
Por eso
las antiguas páginas parecían tan estáticas, ya que su evolución fue a partir de blogs.Y estos a su vez eran poco más que documentos de Word con ciertas imágenes insertadas. Pero distan mucho, esos primeros inicios, de la tecnología que tenemos ahora. Ya no basta con dar una capa de pintura y cambiar el mobiliario, aquí podemos hacer casi cualquier cosa. Sin embargo, no siempre
el diseño web en Valencia va a depender del dueño de la propia página. Es decir, no son tus gustos los que priman sino los del resto. Tal y como pasa con la moda, las páginas web pasan por diferentes tendencias. Y aquí no se trata de tener el mejor comercio, sino de tener el más productivo. Por eso es importante
encontrar un equilibrio entre tus gustos y los de tus clientes.
Tendencias iniciales de los diseños para las website
Los primeros diseños trataban de facilitarnos las cosas porque tenían un sentido fisiológico. La ubicación de las imágenes u otros detalles
facilitaban que el ojo humano pudiera captarlo todo. Impactos cuidadosamente estudiados que pronto caducaron. Sin duda nos dejamos llevar por la capacidad de crear cosas nuevas. Por eso la funcionalidad práctica dejó paso al
diseño. Fue así como empezamos a disfrutar de efectos nuevos y una evolución que, aún hoy en día, sigue siendo ilimitada. Así empezó todo. Aunque, volviendo a las tendencias, año tras año observamos ciertos
patrones que se repiten en los diseños. Es normal que algunos clientes busquen inspiración en otros y así es como aparecen esas modas que tanto nos gustan. Por ejemplo, en los años 2017 y principios del 18,
el minimalismo era generalizado. Habíamos pasado de los fondos oscuros a la claridad. Páginas blancas, letras negras, textos cortos y concisos e imágenes de calidad. A finales del 2018 la tecnología ya empezaba a dejar su impronta en nuestras webs. Nuevas solicitudes y cambios afloraban. Volvían los colores vivos, los efectos llamativos, las imágenes y los sonidos. Los tamaños de las letras crecieron considerablemente. Esas cabeceras con diferentes fotos pasantes se sustituían por vídeos cortos. Aunque ahora parece que de nuevo vuelvan las imágenes fijas. Cambios que buscan ofrecer mayor atractivo para el visitante,
mejorar la usabilidad de la página y aumentar las ventas. El reto actual es encontrar el equilibrio entre ambos mundos; por un lado las
capacidades tecnológicas y por otro el
diseño y usabilidad. Pero por si fuera poco, tenemos que hacer todo esto bajo las estrictas condiciones que marca el
SEO y, por ende, Google.
¿Qué debemos pedirle a una buena página?
Cuando un posible cliente visita tu página web hay varias cosas que debes considerar. Por un lado, lo que vendes o el servicio que ofreces
debe quedar claro al primer vistazo. Esto que parece tan obvio no siempre lo es, así que asegúrate de que se cumple este requisito. Piensa que cuando visitamos un
website nuevo es ese primer vistazo lo que prima. Es decir, posiblemente
le concederemos unos pocos segundos hasta decidir si seguimos navegando o lo cerramos para siempre. Solo unos segundos para aceptar o rechazar. Puede parecerse a lo que sucede si te presentan a algún desconocido. Todas
esas conclusiones que sacas tras el primer vistazo, incluso aunque no hayáis intercambiado ninguna palabra. O si entras a un comercio por primera vez. El entorno digital no está carente de esas experiencias. Por eso
tu página web y su diseño tienen que poder captar esa atención. Al menos hasta completar una compra, en el mejor de los casos ¿no sería eso fantástico? Otro detalle a tener en cuenta es que
somos impacientes por naturaleza y por eso hay que facilitarnos las cosas. Por ejemplo, la información sensible (mail, teléfono) debe verse constantemente. Además de las llamadas de atención o la ubicación del negocio. No todo el mundo querrá pararse a leer, muchos preferirán ir al grano y hay que facilitar ambas opciones. Sin olvidar que
el número de clics también es importante. Por eso los artículos o servicios deben ser rápidos de encontrar. Es decir, estar lo más cerca posible.
Otros detalles valorables
A nadie le gusta ponerse a comprar algo
online y tener que dedicar media hora a culminar dicha compra. Y eso es algo que suele pasar una vez escogemos la opción “finalizar compra” o su variante “finalizar y pagar”. No siempre debería ser requisito indispensable
crearse una cuenta, por eso los formularios deben adecuarse. Introduces el mail, te llega el correo, lo confirmas y vuelves a entrar en tu carrito para seguir adelante. Hay que facilitar las cosas. Te piden datos como el teléfono, el sexo, la fecha de nacimiento o el tipo de trato que prefieres recibir. ¿De verdad que todo eso es imprescindible para hacer una compra? Quizás no se trata de nuestra web favorita, sino solo de
una compra puntual. Por eso deberías
optimizar esos procesos y diferenciar entre crear una cuenta o solo hacer una compra. Posiblemente haya quien escoja el medio digital porque tienen prisa así que ¡no les ahuyentes! No toda la información debería ser obligatoria. Eso sí, toda la parte legal no está nunca de más. Recuerda contratar la protección de datos
según la nueva LOPD e incluir todos los documentos obligatorios. Añade también información sobre el proceso de compra o cómo proceder para las devoluciones y quejas. Las
cookies deben estar especificadas y mostrar el aviso al entrar, solo si tu web las tiene. Y el
formulario de contacto también presentará diferente información que un cliente deberá poder aceptar o no. Como ves, también el diseño web en Valencia tiene una parte obligatoria que no puedes olvidar. Pero si tienes dudas
pregunta a profesionales y estos te aconsejarán respecto a lo que más te conviene. De esta forma te aseguras que el resultado sea perfecto,
funcional y atractivo para tus visitantes.Fotos y textos para el diseño web en Valencia
El diseño de una nueva web también incluye
imágenes y textos. Y aquí no se puede restar importancia a ninguna de las dos partes. Los textos ayudarán a vender, a aclarar las dudas e incluso a posicionar tu página dentro del universo de Internet. Los textos debes ser
lo más claros posible, concisos y visualmente atractivos. Con al menos 300 palabras por página, una palabra clave y uno o dos subtítulos. Recuerda separar los párrafos y redactar frases cortas para que sean más fáciles de comprender. También las fotos son importantes. Esos primeros
impactos que vas a ofrecer de tu empresa, producto o servicio. Y aquí la calidad es importante, mucho. Porque no solo hay que ser bueno, sino también
parecerlo. Seguro que estás de acuerdo conmigo en la importancia que damos a la imagen. Porque
asociamos dicha calidad a nuestra percepción de la misma. Además, hay tipos de negocio en donde es fundamental. Si vendes productos debes permitir que el posible cliente observe cada detalle, amplíe las imágenes y compre justo lo que quiere comprar. Por supuesto, sin recibir luego algo totalmente diferente. La mayor parte de las veces
serán nuestras imágenes las que consigan cerrar una compra. Ni más ni menos. Por eso nuestra recomendación es que no escatimes es la fotografía Y añade tantas como te puedas permitir.
El logo y los colores corporativos
Tanto el logo de tu empresa, como los colores corporativos del mismo, son
detalles que necesitas. Sin embargo, en ocasiones deben contratarse a una empresa de diseño. Es decir, que podrías tener que contratar por un lado la web y por el otro tu logo. También depende de si prefieres recurrir a una empresa de
diseño web en Valencia; a una de marketing o a alguna que te ofrezca todos los servicios. Pero esto no es algo que afecte al resultado, por lo tanto, sigamos. Esa
imagen que represente a tu entidad será la que el cliente asociará con tu producto de forma perdurable. Colores que les recordarán a tu marca y por eso es muy importante que los respetes en tus diseños. Tu página deberá girar entorno a esos colores. Recuérdalo también cuando prepares publicidad física (documentos, flyers, carpetas) y en cualquier representación de tu entidad. Regalos y merchandising. El diseños de tu web no debe ser algo aislado en inconexo, sino
estar integrado perfectamente con tu marca. Tu
website será
tu herramienta principal en el entorno digital. Te ayudará a labrarte una reputación, a crear una comunidad alrededor de tu producto o servicio y, por supuesto, a vender más.
Cualquiera no puede hacer una buena web
Es importante que, llegados a este punto, tengas un concepto claro de todo lo que supone componer esa nueva web que
representará a tu negocio. Y es que parece que cada vez sea más sencillo tener una
website, pero no por ello hay que quitarle mérito. No es lo mismo hacer una web que
diseñar una buena web. Tal y como decíamos antes, tu página será una herramienta a tu servicio. Pero para eso debe ser capaz de trabajar para ti. Es decir, de
captar clientes por sí sola, posicionarse y mejorar tu estatus. Sin duda es importante en manos de quién depositas esa
responsabilidad. La de crear para ti una herramienta funcional. Piensa que si tu página web no está a la altura de tu negocio podría incluso perjudicarte. Por otro lado, si dicha página no dispone de los
elementos tecnológicos o la estructura mínima, será invisible. Entonces no habrá diferencia entre tenerla y no tenerla, a parte del desembolso que hayas hecho por ella. Con esto nos referimos a su capacidad para posicionarse de forma natural. Es decir,
su SEO. Ya que ese posicionamiento en parte depende a detalles informáticos internos. Detalles que no siempre se perciben desde fuera, pero que marcan la diferencia.
Todas las empresas que se precien deberían tener una web profesional
Ahora bien, no disponer de una web es un error. Hoy en día, con la facilidad que nos ofrecen los
smartphones,
buscar información no nos cuesta nada. Por eso, en cuanto conocemos alguna firma nueva, la buscamos en Internet para conocer sus referencias. Nos encanta informarnos y saber estas cosas antes de decantarnos por consumir. Por eso funcionan tan bien las páginas de opiniones y comparaciones. Porque es agradable la sensación de tener el control, de creer que
somos nosotros los que compramos y no los comercios los que nos venden. ¿Qué crees que pasaría si buscan tu empresa y no hay ni rastro de tu marca en formato digital? Quizás el registro de tu SL o algún otro documento. Y no puedes permitir que desistan de su compra antes incluso de iniciarla. ¿Sigues pensando que solo vas a tener oportunidad de vender a los que pasan por tu puerta? Eso si tienes un negocio físico abierto al público. En ese caso ¿por qué no
optimizar tu inversión e infraestructura lanzándonla más allá de tu local? Piensa en esto:
si no estás en Internet no existes.
Escoge bien y quieres tener una web
Esperamos que toda esta información te sea útil a la hora de tomar una decisión. Exige que se contemplen todos los detalles que puedan beneficiarte y
asegúrate de que tu versión digital te hace justicia. Recuerda aportar logo, imágenes y colores corporativos para su creación y preguntar todo aquello que no sepas. Sobre todo, no te vayas con dudas.
Revisa los enlaces, los textos y toda la información que tu página contenga. Finalmente, recuerda que la información principal debe aparecer justo al entrar. Además de dejar muy claro cuál es t
u tipo de negocio y lo que ofreces. Pónselo fácil a tus futuros clientes. Sin duda, escoger un diseño web en Valencia puede ser muy complicado o sencillo si sabes cómo. Por eso es mejor ponerse en manos de expertos como
Tandem Marketing. Y si tienes cualquier duda llámanos y te la resolveremos. Para conocer más acerca de nuestros
servicios y cómo trabajamos,
contáctanos y te contestaremos a la mayor brevedad.